Verás vídeos de gente saltando de cualquier parte; una roca, un espigón sin carrerilla, desde la playa… pero son gente muy experimentada así que de momento olvídate de eso y busca un buen embarcadero donde puedas coger carrerilla cómodo.
Lo ideal suelen ser embarcaderos flotantes para poder meter el foil por debajo sin preocuparte de golpearlo. La altura ideal serían unos 30 centímetros. Si es más bajo se puede hacer pero tu salto hasta la tabla será más grande y perderás precisión. Si es más alto tendrás que ir demasiado agachado y será muy molesto correr así con la tabla.
Para encontrarlo puedes utilizar google maps para explorar tu zona, también puedes buscar clubs de remo o piragüismo de tu zona porque muchas veces suelen tener cerca un embarcadero de estas características. Los embarcaderos para barcos tienden a ser demasiado altos.
Hay distintas opciones:
- Puertos marítimos. Aunque depende del lugar hay muchas posibilidades de que te lo prohíban
- Lagos y pantanos. Vigila la normativa del lugar para no tener problemas.
- Azudes de ríos. Cuidado porque el azud puede ser alto pero en el fondo muchas veces se acumulan piedras o troncos así que tendrías que nadar por la zona antes de lanzarte con el foil.
- Rías. Suele ser un lugar típico de remo, con aguas calmadas y profundas, ideales para poner embarcaderos.
Lo ideal es que tengas al menos 10 metros para correr, así te dará tiempo de sobra para acelerar despacio (sin patinar por arranques rápidos), colocar las manos en el lugar adecuado, y darle presión al foil para que se ponga en funcionamiento. La distancia mínima serían 3 metros para al menos poder dar 2 pasos, pero tendrás que ser muy explosivo para sacar la velocidad necesaria en tan poco espacio, como en el ejemplo del siguiente vídeo.
Al terminar el embarcadero ( el lugar donde tienes que subirte a la tabla) debe estar despejado y profundo hacia ambos lados. Ten en cuenta que la tabla puede hacer un giro inesperado en cualquier momento, y quizá tú te puedas tirar al agua antes de llegar al límite pero la tabla con el foil puede seguir avanzando unos cuantos metros tranquilamente.

También debe haber aguas profundas, al menos 2 metros. Quizá pienses que con que cubra 1 metro ya consigues que el foil no pegue en el fondo, pero con tu peso encima y una tabla de pocos litros puedes enviar el foil con tabla fácilmente 2 metros por debajo.
La profundidad no es solo cuestión de no dañar el equipo, si vas surfeando y golpeas el fondo por ejemplo te puedes dañar una rodilla por el golpe seco. Además si tu tabla se gira, tu foil tiene una envergadura de casi un metro y el fondo es de un metro, entonces un lado del foil tocará el suelo y tu podrías caer sobre el otro y hacerte mucho daño (incluso clavartelo) al encontrar el foil un tope por el otro lado.